La transcreación: un activo clave para el éxito de tus campañas de marketing internacional
El tiempo en que las empresas traducían su contenido de marketing definitivamente ha terminado. A partir de ahora, las audiencias objetivo -dependiendo del país- esperan que un mensaje o un discurso se dirija a ellos personalmente. Por ello, las empresas deben ahora revalorizar sus discursos, para que tengan el mismo impacto emocional en todas las culturas.
Sea lo que sea, la comunicación personalizada es la clave del éxito en el extranjero.
Transcreación: traducción creativa
La transcreación consiste en adaptar un mensaje en un idioma de destino, teniendo en cuenta la cultura específicamente. Por su vocación fundamentalmente creativa (Traducción + creación = transcreación), la transcreación permite ofrecer una adaptación óptima del mensaje de la marca a cada mercado objetivo para maximizar su impacto. El transcreador o la agencia a cargo de la transcreación luego se asegura de que las expresiones, el espíritu, el humor, las referencias a los símbolos estén en sintonía con el contexto cultural de la audiencia objetivo.
No más traducciones literales, el enfoque es diferente. Efectivamente, no basta con dominar el vocabulario y la sintaxis del mercado al que va dirigido internacionalmente, también hay que demostrar a los habitantes de este país que se entiende su identidad, su cultura, que se tiene en cuenta y se respeta su valores.
Invertir en transcreación es también invertir en imagen de marca
Una traducción literal puede hacerte perder por completo tus ambiciones comerciales y ahuyentar a los consumidores que no han percibido los mensajes de la forma correcta, de ahí el interés fundamental de la transcreación para el marketing de contenidos de destinos internacionales.
Cuando el mensaje es relevante y se adapta a una audiencia, tiene todas las posibilidades de captar la atención de verdad.
Traducción, Transcreación, Localización: ¿Cuáles son las diferencias?
La traducción se trata de tomar contenido y literalmente adaptarlo a otro idioma.
La localización va más allá de la traducción literal y utiliza palabras y frases adaptadas a los mercados de destino. Esto ayuda a generar más interés y compromiso entre los consumidores. No solo hablas su idioma, hablas como ellos.
La transcreación va más allá de las meras palabras, es más ingeniosa. El objetivo es ofrecer a la audiencia un mensaje perfectamente comprensible a través de todos sus prismas culturales.
Algunos ejemplos de transcreaciones:
El buen ejemplo: Haribo: Traducido del alemán “Haribo macht Kinder froh und Erwachsene ebenso”, literalmente: “Haribo hace felices a los niños tanto como a los adultos”, el transcreador ha elegido una fórmula más adecuada e impactante para el mercado francés con el ahora célebre eslogan publicitario: “Haribo c’est beau la vie, pour les grands et les petits«
El mal ejemplo: Coca-Cola: si bien la marca quería traducir su nombre de marca para el mercado chino, el grupo tradujo literalmente Coca-Cola como «kekoukela», que en algunos dialectos significa «yegua rellena de cera».
Muchos sectores pueden utilizar la transcreación. Uno de los ejemplos más famosos es la exportación de Spider-Man a la India, donde el protagonista Pavitr Prabhakar (un juego de palabras basado en el nombre de Peter Parker) libra su pelea frente al Taj Mahal mientras su equivalente estadounidense pelea en Times Square.
Sin embargo, la transcreación no siempre es imprescindible, puede ser inútil cuando el concepto es lo suficientemente potente y entendible por el mayor número: Nike con «Just do it», McDonald’s con «I’m loving it» y Volkswagen con «Das Auto». son buenos ejemplos.
¿Cuándo se debe utilizar la transcreación?
Para un documento particularmente técnico que no contiene ni emoción ni referencia cultural, una traducción clásica será más que suficiente. Por otro lado, el contenido emocional, que presenta rimas, humor, expresiones, juegos de palabras, ya no tendrá ningún significado si se traduce como está. Entonces será necesario proponer otros nuevos, manteniendo la intención básica, para que el mensaje tenga el mismo significado y la misma resonancia, independientemente del país de destino.
Por lo tanto, el proceso de transcreación es necesario para cualquier traducción de marketing o relacionada con la comunicación o la publicidad, cualquiera que sea el medio: eslogan, sitio web, pantalla, aplicación, comercio electrónico, etc.
La importancia de contactar con una agencia especializada en transcreación.
¿Has escrito el texto en el idioma del mercado objetivo, pero tienes la impresión de que los mensajes no funcionan localmente? Como hemos visto, su adaptación a los contextos socioculturales de sus mercados objetivo es una necesidad.
La transcreación es una profesión real, una combinación de habilidades lingüísticas y de marketing. Al igual que una misión de traducción jurídica que debe delegarse en un traductor experto en la materia, un servicio de transcreación requiere el saber hacer de un experto, un socio que podrá ofrecer un apoyo personalizado y que será de propuesta.
Habilidades requeridas para la traducción de transcreación:
Dominio perfecto de ambos idiomas de su combinación de idiomas
Dominio perfecto de ambas culturas.
Sólida experiencia en su campo de actividad.
Un sentido agudo de la fórmula de choque
El bolígrafo con el estilo correspondiente a tu ADN
Transcreation ofrece un mensaje personalizado para cada país objetivo y apoya el desarrollo de la conciencia de marca en sus ambiciones internacionales. Este enfoque creativo es un activo innegable y diferenciador frente a los competidores y será una llave imparable para penetrar en mercados exteriores cerrados.
Es fundamental recurrir a especialistas en transcreación de marketing que pondrán la experiencia y habilidades al servicio de tus intereses, para que los mensajes conserven su fuerza inicial y su espíritu, reformulándolos lo mejor posible para los destinatarios en sus idiomas. , con una lista de palabras SEO adaptadas según sus respectivas culturas y sensibilidades.
En todas partes, el ADN de la marca será respetado y transcrito, adaptándose a las costumbres locales y especificidades del mercado objetivo, en perfecta coherencia.